INFO C.A.I. _ 24-02-2013

lunes, 8 de noviembre de 2010

Torneo Apertura 2010
S.Lorenzo 1Independiente 1
El negocio del RojoGodoy se le escapa a Placente.

Independiente, que fue con un equipo muleto, se llevó un buen empate y sigue pensando en la Copa. San Lorenzo jugó un rato con uno más (roja a Galeano), pero no supo cómo cerrarlo. Tula y Pacheco, los goles.

Recuperarse a las adversidades, fue el lema de Independiente en el Nuevo Gasómetro. De arranque, fue con un equipo plagado de suplentes, priorizando, claro, los cuartos de final de la Copa. Para colmo, San Lorenzo se puso arriba con el gol de Tula. Y para el combo, se quedó con diez por la roja a Galeano. Pero no está muerto quien pelea, dicen. Reaccionó a tiempo para empatar y, con uno menos, aguantó la embestida del final. Por eso, el negocio fue del Rojo.

De arranque, el Ciclón demostró la jerarquía de los nombres en cancha y tuvo tres llegadas claras antes de los diez minutos. En la más peligrosa el palo amargó a Rovira, que definió a un costado de Hilario y se quedó con el gol atragantado. Pero ese embate fue bajando en intensidad, directamente proporcional con el aumento de la actitud y comodidad de los de Mohamed (por cierto, con un look veraniego interesante). Así se emparejó el trámite y Gracián puso el 1-1 en palos: el travesaño le dijo no y el primero tiempo cerró bien con el empate.

En el segundo la relación con el caño cambió. El palo dejó de ser anti gol, para habilitar a Tula y que el capitán (volvía a ser titular después de seis partidos) ponga el 1-0 parcial ante la inmovilidad del arquero del Rojo. Acá apareció la primera reacción del muleto de Avellaneda: Martín Gómez, el mejor de los visitantes, guapeó contra Botinelli, la ganó y se la dio a Pacheco, para que de zurda ponga la parda. Después de eso ninguno de los aprovechó el ancho de la cancha y apenas hubo algunos destellos de Romagnoli y Gómez.

Sobre el final, a los 41’, Galeano le hizo una especie de tackle francés -pero con la punta de su botín- a Balsas y tuvo que dejar la cancha. San Lorenzo fue con más ganas que ideas, acorraló a Independiente con centros, pero los de Avellaneda no se amedrentaron y aguantaron la ropa. Por eso, Mohamed sigue con la cabeza en la Sudamericana, de donde nunca la sacó: por algo puso un equipo B…

Fuente : Olé

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